TUVIERON UNA OPORTUNIDAD
Los chicos y chicas de nuestra familia, no han tenido una vida fácil. A todos ellos les ha golpeado la vida a una edad muy temprana. No obstante, gracias a la generosidad de muchas personas, ahora tienen un hogar y pueden acudir a clase como cualquier niño.
A continuación, puedes ver la historia de algunos de ellos.
YASIR NAYAMAT
La madre de Yasir se dedica a la prostitución. Cuando se enteró de que estaba embarazada, intentó abortar, pero no lo hizo porque le avisaron de que podía morir durante la intervención. Yasir nació ciego y con un problema congénito en el corazón. Su madre le cuidó durante sus primeros años. En una ocasión, tuvo que ingresarlo en el Hospital debido a su enfermedad, salió a buscar unos medicamentos, pero no volvió. Pasados unos días, los médicos se pusieron en contacto con nosotros. De esta forma Yasir entró en nuestra familia
LA HISTORIA DE SKEENA
Skeena es una chica cristiana que perdió a su padre siendo una niña. Ante la precaria situación económica en que se hallaba su madre, a los 15 años empezó a trabajar como sirvienta en la casa de una rica familia musulmana. El cabeza de familia la violaba repetidamente, hasta que Skeena quedó embarazada. En Pakistán, las leyes prohíben las relaciones extramatrimoniales, por lo que le arregló un matrimonio con un hombre impotente. Tras el matrimonio de Skeena, nació un niño HAROON. No obstante, el padre del niño, siguió violándola, a consecuencia de lo cual quedó embarazada de nuevo, así nació MOUSA. Al morir el marido de Skeena, el padre de sus hijos la dejó abandonada. Actualmente, Skeena y sus hijos se hallan bajo nuestra protección.
ADIL
Irfan, el padre de Adil y sus hermanos, Aquil y Ajab Gull , conducía un rickshaw con el que mantenía a su familia. Desgraciadamente, empezó a tomar heroína por lo que rápidamente se convirtió en adicto. La economía familiar se resintió rápidamente. Llegó un momento en el que el padre vendió el rickshaw, su único medio de vida. La madre de los niños, en su desesperación, también empezó a inyectarse heroína. Finalmente, la familia perdió hasta su vivienda, que se vendió para hacer frente a las deudas contraídas por los padres por su adicción. Los esfuerzos del tío paterno para desintoxicar a Irfan, resultaron inútiles. Los padres fallecieron con seis meses de intervalo, haciéndose cargo de los tres niños su tío paterno. No obstante, la esposa del tío de los niños los rechazó, maltratándolos frecuentemente. Ante la situación, el tío de los chicos se puso en contacto con nosotros. Después de examinar el caso, los tres hermanos fueron admitidos en Mother Care Center donde tienen una vida estable bajo nuestra supervisión.